ORIENTAGUADALPIN: Melancolía del "realismo mágico"

Los que nos dedicamos a Educación y amamos la Literatura, no podemos quedarnos indiferentes ante su muerte.

Todos despedimos y lloramos a Gabriel García Márquez "Gabo", gran escritor universal y buen merecedor del Premio Nobel de la Literatura. Nos deja un gran legado literario que nos permitirá seguir con la exquisitez de sus obras. "Aún recuerdo, siendo muy joven, cuando leía "El Amor en los tiempos del cólera" ( uno de mis libros favoritos).Deseaba llegar a casa y continuar con la lectura. No importaba la hora. Estaba cautivada por la belleza de las palabras y la espléndida historia.Descubrí lo que era el "realismo mágico". Gracias a él, el genio de la Letras. Gratitud por su fantasía, magia y sueños".

* He recopilado ( fuente: Internet) algunas frases memorables:

" Lo único que me duele de morir es que no sea de Amor".
"Lo único que puede salvarnos de la barbarie es una cultura de Paz".
"Sería ideal que un niño dedicara parte de su fin de semana a leer un libro hasta donde pueda y hasta donde le guste -que es la única condición para leer un libro-, pero es criminal, para él mismo y para el libro, que lo lea a la fuerza en sus horas de juego y con la angustia de las otras tareas". De Manual para ser un niño.
"El deber revolucionario de un escritor es escribir bien".
"Jubilemos la ortografía, terror del ser humano desde la cuna: enterremos las haches rupestres, firmemos un tratado de límites entre la ge y la jota y pongamos más uso de razón en los acentos escritos, que al fin y al cabo nadie ha de leer lagrima donde dice lágrima ni confundirá revolver con revólver. Y que de nuestra be de burro y nuestra ve de vaca, que los abuelos españoles nos trajeron como si fueran dos y siempre sobra una".
"El deber de los escritores no es conservar el lenguaje, sino abrirle camino en la historia. Los gramáticos revientan de ira con nuestros desatinos, pero los del siglo siguiente los recogen como genialidades de la lengua. De modo que tranquilos todos: no hay pleito. Nos vemos en el tercer milenio".
"Yo creo que todavía no es demasiado tarde para construir una utopía que nos permita compartir la tierra".
"Un hombre solo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo cuando ha de ayudarle a levantarse".
"No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad".
"La fama estuvo a punto de desbaratarme la vida, porque perturba tanto el sentido de la realidad como el poder” (Magazine La Vanguardia, Barcelona, 2006).
"Escribo para que quieran más. Creo que es una de las aspiraciones fundamentales del escritor" (Revista "Siesta", España, 1977).
"El éxito no se lo deseo a nadie. Le sucede a uno lo que a los alpinistas, que se matan por llegar a la cumbre y cuando llegan, ¿qué hacen? Bajar, o tratar de bajar discretamente, con la mayor dignidad posible".
"La música me ha gustado más que la literatura". En Juventud rebelde, La Habana, 1988.
"La primera condición del realismo mágico, como su nombre lo indica, es que sea un hecho rigurosamente cierto que, sin embargo, parece fantástico". En Reforma, México, 2000.
"La vida no es lo que uno vivió, sino que lo que recuerda, y cómo la recuerda para contarla".